REVISIÓN MENSUAL PESO MEXICANO
El peso mexicano ha atravesado uno de sus meses más difíciles tras la victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos. Desde entonces, México ha enfrentado fuertes presiones arancelarias, lo que ha mantenido a la moneda en un estado de debilidad y alta sensibilidad ante cualquier dato económico de Estados Unidos que impacte los mercados.A lo largo del mes, el peso experimentó altas y bajas, reflejando la incertidumbre en torno a las políticas comerciales de Trump. En términos numéricos, la moneda solo se depreció un 0.8% desde el 2 de enero de 2025, pero los distintos eventos políticos y económicos generaron movimientos significativos. A nivel gráfico, el peso ha permanecido en un rango amplio, estableciendo su referencia en los niveles alcanzados tras la victoria de Trump.
Inició el mes en 20.87 pesos por dólar y está cerrando cerca a los 20.71.Gráfico referencia de precios donde Donald Trump tuvo su victoria electoral y el precio actual. Gráficos de TradingView.El diálogo entre Estados Unidos sigue centrado en la política monetaria y la relación de Trump con la Reserva Federal. Trump ha sido crítico con la gestión de la Fed respecto a la inflación y, desde su investidura el pasado 20 de enero, ha tomado decisiones económicas enfocadas en su visión de crecimiento interno.
A pesar de estas presiones, la Fed optó por mantener las tasas de interés sin cambios, alineándose con el periodo anterior.Desde una perspectiva interna, la salud económica de México sigue debilitada. La confianza empresarial se ha deteriorado ante las crecientes presiones comerciales, especialmente tras la confirmación de la Casa Blanca de que los aranceles del 25% entrarán en vigor el 1 de febrero.Trump ha reiterado su intención de fortalecer la producción estadounidense y reducir la dependencia de países extranjeros, impulsando una política de autosuficiencia.
Además, evalúa la imposición de aranceles sectoriales en industrias clave como farmacéuticas, semiconductores, acero, aluminio y cobre, e incluso considera gravar el petróleo.Con la ejecución de los aranceles prevista para el próximo sábado 1 de febrero, el gobierno y las empresas mexicanas deben anticiparse y prepararse para mitigar el impacto económico.
Sin embargo, la falta de un plan claro por parte de Claudia Sheinbaum genera cierta incertidumbre. Se espera que su respuesta sea firme y estratégica, pero hasta ahora no se ha presentado una propuesta concreta para contrarrestar estas medidas. Si bien ha mostrado robustez al defender temas como el cambio de nombre del Golfo de México a Golfo de América, aun necesita mostrar más decisiones para conservar la credibilidad y la fortaleza que el país necesita antes estos eventos.A medida que se acerca la fecha límite, el mercado, los empresarios y los ciudadanos mexicanos esperan definiciones claras que brinden estabilidad y confianza frente a este nuevo desafío comercial.Felipe Mendoza Analista de mercados para ATFX LATAM