El Coaching como herramienta clave para gestionar el cambio, adversidad e incertidumbre en PyME’s
Vivimos en mundo en donde el cambio es cada vez más dinámico y la velocidad con la que ocurren las transformaciones impacta los diferentes modelos de negocios, procesos y sobre todo la cultura organizacional; esto pone a prueba los paradigmas de las pymes quienes deben encontrar nuevas perspectivas para entender, aprender y gestionar el cambio, para así adaptarse y aprovechar el mismo para crecer.
El coaching se convierte en una competencia clave para crear estas nuevas perspectivas que permitan a los líderes de las pymes gestionar de forma más efectiva el cambio, todo en un proceso de acompañamiento reflexivo y creativo que les inspira a encontrar oportunidades, posibilidades y soluciones para maximizar su potencial y crear una cultura organizacional resiliente que crece con el cambio.
La gestión del cambio es una variable permanente en el mundo organizacional y empresarial. Según el artículo “Coaching for Change” de Richard E. Boyatzis, Melvin Smith y Ellen Van Oosten publicado en la revista Harvard Business Review, señala que el coaching es un gran aliado en el proceso de transformación por sus contribuciones:
- En lugar de dar consejos, un buen coach hará preguntas exploratorias y abiertas y escuchará con atención y preocupación genuinas.
- La idea es hacer que las personas que reciben el coaching visualicen un yo ideal (quiénes desean ser y qué desean hacer), explorar el yo real (no solo los vacíos que necesitan llenar sino también las fortalezas que los ayudarán a hacerlo), establecer una agenda de aprendizaje, y luego experimentar y practicar nuevos comportamientos y roles.
El Msc. Roberto Brenes, business coach certificado por ICF y coach Organizacional, señala que “el coaching es una inversión que nos regala la pregunta como una de las herramientas más poderosas para ampliar nuestra perspectiva y encontrar nuevos recursos para gestionar situaciones complejas y crear en nuestra empresa una conducta resiliente que podemos aprender, entrenar y dominar para lograr potenciar nuestra capacidad de enfrentar las situaciones adversas que enfrentamos en nuestro día a día”.
Una persona técnicamente capacitada y con una débil competencia para enfrentar la adversidad, no tomará las mejores decisiones y su preparación técnica quedará en segundo plano por los bloqueos, miedos e incluso explosiones emocionales que pueda presentar, las cuales impactarán negativamente su vida personal, familiar, la relación con sus compañeros de trabajo y a los mismos clientes.
El coach Msc. Roberto Brenes nos comparte una guía básica de aspectos que como emprendedor o empresario debes de tomar en cuenta a la hora de enfrentar cambios que impacten a tu compañía y colaboradores:
- Definir tu punto de partida.- Hacernos unas preguntas con respecto a diversos cambios a los que se está enfrentando actualmente la compañía, ayuda a darse cuenta de dónde nos encontramos.
- Elevar el nivel de consciencia.- El análisis que obtengamos de las preguntas previamente realizadas, permitirá elevar el nivel de autoconciencia y entender cómo estamos enfrentando los cambios. La mentalidad y creencias de cada uno de los líderes puede favorecer, limitar o bloquear el comportamiento para enfrentar los cambios.
- Identificar los recursos internos.- Es importante conocer bien e identificar los recursos con los que contamos, puesto que se convierte en un elemento poderoso para movernos y gestionar los cambios y la adversidad. Evaluar qué se necesita, quién cuenta con las capacidades o habilidades para lograr el objetivo son algunos de los puntos que debes de considerar.
- Reencuadrar las situaciones.- Otra forma en la que podemos fortalecer nuestra capacidad de gestionar el cambio y las situaciones adversas en nuestras empresa es re-encuadrando esos hechos y experiencias desfavorables, para buscar abordajes desde diferentes perspectivas, y centrarnos en aquel que nos resulte más útil.
De la reflexión a la acción
Una vez realizado el ejercicio anterior que te permite analizar la situación, elevar tu nivel de conciencia, clarificar qué quieres lograr, qué te planteas mejorar, ajustar en ti como líder, identificar los recursos internos que tienes, necesitas y diferentes alternativas para gestionar el cambio y la adversidad en tu empresa, ahora toca pasar de la intención a la acción, identificando las conductas claves para lograr que esas reflexiones se conviertan en conductas, hábitos medibles que te permitan incidir positivamente en lograr lo que te propones.
“Como todo en la vida aquí es donde aparece el factor diferenciador -convertir las reflexiones en acción-, pues al tomar acción es que aprendemos, crecemos y es donde la magia ocurre, el coaching te regala esa posibilidad de abrirte a las posibilidades, ampliar tus perspectivas y crecer acompañado de un coach es una de las mejores inversiones”, finalizó el coach Msc. Roberto Brenes.
