Monterrey, Nuevo León, 24 de octubre de 2022. Con el objetivo de impulsar el bienestar de las personas, de explorar caminos para conectar con la propia conciencia y brindar herramientas para vivir en plenitud, se realizó el “Wellbeing 360”, organizado por Tecmilenio, de mano de expertos mundiales, quienes compartieron por cuatro días sus experiencias y conocimientos.
En su ponencia “Inteligencia emocional para una vida plena”, Miguel Ángel Díaz Escoto habló sobre la capacidad de manejar las emociones. Su manera de trabajar este aspecto está influida por el modelo de los especialistas John Mayer y Peter Salovey, el cual se basa en cuatro habilidades: la primera tiene que ver con las emociones, para aprender a usarlas adecuadamente, después comprender de dónde vienen, luego cómo van evolucionando y finalmente poderlas gestionar adecuadamente. Tales capacidades ayudan además a saber cómo ayudar a los demás.
Como presidente de la ASNIE (Asociación Nacional de Inteligencia Emocional) con sede en España, Díaz Escoto indicó que su propósito es ayudar a la alfabetización emocional y que cada vez más personas puedan sentirse plenas o al menos entiendan por qué no sienten esa plenitud.
Por su parte, el autor del libro “Todas las mañanas de tu vida” el español Pedro Correa planteó, en su conferencia “Necesidades fundamentales olvidadas”, un breve panorama del malestar anímico que aqueja a mucha gente en medio de este sistema capitalista neoliberal. Apuntó la urgencia de recuperar lo que llama necesidades fundamentales invisibles como el amor, la alegría, la colaboración, la empatía, la benevolencia y el sentido de la vida.
Asimismo, Timothy Sharp, académico y líder de renombre internacional, en su plática “Crianza positiva: consejos prácticos de la ciencia de la psicología positiva”, explicó que, según estudios sobre la longevidad realizados en universidades como Harvard, se concluyó que lo que más contribuye al bienestar y una vida más plena, es amar y ser amado, lo que genera relaciones esencialmente positivas”.
Para llegar a esto, agregó que, “cuando se trata de crianza positiva queremos centrarnos en fomentar, desarrollar y mantener relaciones benéficas con nuestros hijos para ayudarlos a construir relaciones positivas con sus amigos, con sus compañeros, con sus redes sociales. Ésta es una meta posible
de Stanford y la doctora Rosalinda Ballesteros, directora del Instituto de Ciencias del Bienestar Integral de Tecmilenio, coincidieron en que la mayoría de las personas definen el estrés como todo lo que no quieren sentir y aquello con lo que no quieren lidiar. Sin embargo, el estrés es lo que surge cuando algo que te importa está en juego. Por lo tanto, si incluye tus pensamientos, tus sentimientos y tus emociones, también puede incluir cosas como el enfoque y el coraje.
Cuando uno se enfrenta a una problemática, se debe cuestionar si hay algo que se puede hacer, decir, o qué camino elegir. Saber si hay alguien con quien puedo conectarme para marcar una diferencia positiva o evitar un peor estrés y mayor sufrimiento. “Entonces, en lugar de decir que mi corazón late con fuerza. Debemos descubrir con preguntas ¿qué es lo que me importa? ¿Y qué puedo hacer en este momento?”, afirmó Kelly McGonigal.
Por su parte, la Princesa Sarah Asem Ben Nayef, coach de vida transpersonal, cofundadora de The Kyan Project y entrenadora mundial de MindUp Organization, habló sobre “El poder de la paternidad compasiva” como una forma segura de asumir la crianza de los hijos para comprender cómo desarrollar su inteligencia emocional de manera positiva. Emociones como el apego y la compasión son fundamentales para desarrollar una familia más plena.
“¿Cómo cultivar un mayor sentido en nuestras vidas?”, fue la conferencia que dictó la psicóloga chilena Mónica López, quien compartió nociones cruciales para que las personas brinden mayor sentido a sus vidas. La directora de la Fundación Vivir mencionó a la competencia y la autonomía como elementos claves. Y subrayó también la necesidad de establecer relaciones personales saludables.
Se refirió al modelo de cuatro pilares, de la estadounidense Emily Esfahani Smith, para encontrar un significado mayor en la vida. Este modelo comprende como fundamento el sentido de pertenencia para el bienestar. También incluye el propósito, el “usar las fortalezas para poder hacer una diferencia”, y con ello fluir hacia una meta. Después, está la trascendencia, el sentirse por encima de las circunstancias cotidianas y conectarse con algo profundo y grande. Y finalmente, el relato, aquel que creamos de nosotros mismos y de nuestra vida. Si somos conscientes de esa narrativa, podemos reflexionar y conseguir que no nos impida avanzar.
Concluye esta décima edición de manera exitosa, pero Wellbeing 360 sigue todo el año. Te invitamos a visitar la plataforma https://wellbeing360.tv/ para acercarte a contenido exclusivo, acceder a conferencias, contenido On demand; y tener herramientas que permitan generar hábitos positivos. Seguir al Instituto a través de sus redes sociales y unirte a los grupos en LinkedIn y Facebook.
Wellbeing 360 fue resultado del esfuerzo de Tecmilenio en colaboración con el Instituto de Ciencias del Bienestar Integral, con la finalidad de promover el bienestar para una vida plena y la implementación de prácticas positivas que promuevan la felicidad.
