Mal uso de antibióticos podría incrementar el riesgo de enfermedades crónicas

  • Se estima que en México hasta el 50% de los antibióticos prescritos no son necesarios o no son óptimamente eficaces según lo prescrito1

Ciudad de México, 6 de junio2023. A pesar de que el tratamiento con antibióticos es común para algunas enfermedades, este medicamento también combate bacterias benéficas para la salud, lo que genera un desequilibrio en el intestino y esto aumenta la susceptibilidad a desarrollar enfermedades como obesidad, diabetes o dermatitis atópica2.  

En lo que respecta a México, de acuerdo con información de la Secretaría de Gobernación, hasta el 50% de los antibióticos que se recetan a las personas, no son realmente necesarios; en su lugar, existen tratamientos con probióticos y prebióticos que contribuyen a prevenir enfermedades al fomentar una microbiota intestinal en equilibrio, lo que beneficia al sistema inmune.  

“En nuestro país, la venta de antibióticos anual va entre los 50-60 millones de cajas, esto se traduce entre 150-200 millones de pastillas antibióticos consumidas al año. Es relevante conocer estas cifras porque nos da una idea de cuántas personas reducen la diversidad, función y riqueza de su microbiota al usar este medicamento”, dijo el Dr. José Lorenzo García, director médico de Biocodex México. 

La microbiota intestinal se compone de aquellos microorganismos y bacterias alojados en esta zona, por lo que cualquier alimento o medicamento que consumimos la impacta. Cuando este ecosistema presenta una alteración, se le conoce como disbiosis, lo que provoca que el sistema inmune se vulnere y se alojen bacterias o virus dañinos. 

Existen vías de solución ante este consumo excesivo en el país, uno de ellos es la Estrategia Nacional de Acción contra la Resistencia a los Antimicrobianos, impulsada por la Secretaría de Gobernación; también existen asociaciones como la Biocodex Microbiota Foundation que este año busca apoyar la investigación nacional al financiar con 25 mil euros un estudio que aborde los antibióticos y sus efectos en el ecosistema intestinal. Para este último punto, los interesados tienen hasta el 4 de junio para inscribir sus trabajos aquí

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