En el marco de la conmemoración en el mundo de la lucha de las mujeres por la igualdad, el reconocimiento y el ejercicio efectivo de sus derechos, datos de Fundación Forge y diversas organizaciones arrojan una mayor dificultad para las mujeres jóvenes que buscan ingresar al mercado laboral.
Ciudad de México, 09 de marzo de 2023 – Cada vez son más contundentes las pruebas que evidencian que el empoderamiento económico de la mujer es sustancial para lograr un crecimiento inclusivo, sobre todo en los países de ingresos bajos. Una mayor igualdad de género en el trabajo remunerado favorece al crecimiento económico, y es más probable que éste signifique un desarrollo social amplio en tanto vaya acompañado de un mayor acceso de la mujer a un empleo equitativamente bien remunerado y seguro.
En este sentido, la inserción laboral es un proceso complejo en especial para aquellas mujeres en situación de vulnerabilidad que dejan atrás la etapa estudiantil e intentan conseguir su primer empleo. Por esto, la Fundación Forge tiene la misión desde hace 18 años, de capacitar en liderazgo personal y orientación laboral a jóvenes que comienzan a buscar su primer trabajo.
Los números son alarmantes, según un informe reciente de la Organización Internacional del Trabajo el porcentaje de desempleo en el mundo es aún mayor en el caso de las mujeres y los jóvenes, lo que pone de manifiesto grandes desigualdades en los mercados de trabajo de muchos países.
La tasa mundial de actividad de las mujeres se situó en el 47,4% en 2022, frente al 72,3% en el caso de los hombres. La diferencia de 24,9 puntos porcentuales significa que por cada hombre económicamente inactivo hay dos mujeres en esa misma situación. Los jóvenes (de 15 a 24 años) encuentran graves dificultades para conseguir un empleo decente: su tasa de desempleo es tres veces superior a la de los adultos mayores.
De acuerdo con el reporte Trabajo decente en México, 2005-2022: Análisis con perspectiva de género presentado por el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) de IPADE Business School, con el apoyo de Gentera, la mayor diferencia entre mujeres y hombres se observa en el indicador Jóvenes sin estudiar, capacitarse o trabajar, donde el porcentaje para las mujeres en 2022 es 26.3%, muy alto comparado con el 9.7% de los hombres.
¿Cómo combatir esta situación?
La búsqueda de un primer empleo para los jóvenes se hace aún más difícil por su poca experiencia y los requisitos de las organizaciones, sobre todo en aquellos que se encuentran en una situación vulnerable. Y en el caso de las mujeres, es aún más grave ya que ellas quedan al cuidado de sus hermanos menores, abuelos, y otros integrantes de la familia. Si bien hay diversos factores que contribuyen a esta situación, para revertir este escenario es fundamental adecuar las oportunidades educativas y laborales desde el ámbito empresarial y legislativo.
Para lograr una igualdad real se debe trabajar en una igualdad salarial, tal como lo explica María José Gómez Gónzalez, Directora Fundación Forge para la Región Andina y especialista en género. “Con una brecha salarial promedio del 30% en Latinoamérica, no podemos hablar de igualdad, sino de distinto valor, necesitamos avanzar en conjunto con las ONG, Empresas privadas e instituciones públicas para que el cierre de la brecha sea efectivo de manera urgente”, comenta.
Este proceso debe abordarse desde una perspectiva integral de la persona para un mejor desarrollo y formación. La Fundación Forge colabora en revertir esta situación con programas y cursos gratuitos que buscan acompañar a jóvenes económicamente vulnerables, en donde las mujeres representan más de la mitad de sus estudiantes.
En este sentido, Gómez Gónzalez comenta: “En Forge tenemos un módulo específico de género con la intención de que las mujeres conozcan la situación a la que se enfrentan y desarrollen herramientas para una mejor negociación en el trabajo y en la vida”. Y agrega “en los programas la mayoría de cursantes son mujeres, pero sin embargo en proporción se insertan más rápido los hombres que ellas”.
A través del Programa Tu Futuro, una vez egresados, los jóvenes cuentan con una insignia que certifica su entrenamiento en temas como el trabajo en equipo, la autonomía o liderazgo, y una red de compañeros que generan una comunidad de oportunidades. Se trata de una experiencia online que persigue el desarrollo de habilidades socioemocionales para el fortalecimiento de la persona frente a los requisitos del mercado laboral para puestos entry level o principiantes.
En México el Programa Tu Futuro cuenta con 12,340 beneficiados hasta el momento, desde su inicio en 2015. María Fernanda Yong, Directora de Alianzas Estratégicas para Forge México, señaló que “en el marco del Día Internacional de la Mujer, nos sentimos muy satisfechos con los logros de nuestras graduadas ya que representa una oportunidad de un cambio en sus vidas y sobre todo en generar confianza en ellas mismas y que con preparación pueden lograr muchas cosas”.
Algunos testimonios:
Rosa Isela: “Gracias a la Fundación Forge soy empleada de una planta de alimentos en Irapuato, Gto., logré pasar los filtros de selección y formar parte de este equipo. Muchas empresas me cerraron las puertas antes de esta preparación, pero ahora cumplo mi sueño de trabajar en una planta industrial, ver cómo es el proceso de elaboración de alimentos y hoy vivo eso todos los días. Antes de conocer Forge, en casa vivía violencia familiar por parte de mi hermano y no tenía mucho apoyo de mis padres. Gracias a la beca de Fundación Forge para prepararme, pude mudarme a Irapuato, ser independiente y alejarme de un ambiente inestable y malo para mi persona”.
Ana María Armenta: “Forge para mi ha sido una ayuda enorme, ha sido más que un curso para el ámbito laboral, con mis referentes y mi tutora he tenido más amor propio, empoderamiento, confianza en mí misma, y amar; lo que en su momento consideraba cosas malas en mí, durante el curso he pasado varias adversidades como el fallecimiento de mi mamá y la complicación de ingresar a la Universidad, pero Forge me ha brindado herramientas y personas con las que puedo confiar y sé que me ayudaron a mejorar y no estancarme en un mal rato, sino utilizar esas herramientas para no dejarme caer y seguir adelante por mi y para los míos. En Forge tod@s son tus amigos, te apoyan, te comprenden, te motivan y lo más importante te respetan”.
Karen Villicaña: “En mi caminar por Forge, aprendí que ninguna mujer está hecha con el mismo molde, somos tan diversas que cada una brilla en una frecuencia diferente. Mi brillo está en la euforia, el adueñarme de espacios, ser aquella loca sedienta de experiencia y abundante en anécdotas y conocimiento, gracias a mi tutora en Forge aprendí que quería ser esa mujer; soy aquella mujer que te ayudará a subir para que deslumbres a todos con tu brillo, como en su momento las mujeres Forge me ayudaron a descubrir el mío”.
Mariana Robles: “El sistema patriarcal me hizo creer que no tenía el potencial para lograr lo que me propusiera, por mi orientación sexual y por ser mujer, pero gracias a Forge y al equipo que encontré en la compañía de seguros que ahora trabajo, hoy sé que soy capaz de llegar tan lejos como deseé, mientras me esfuerce”.